Aunque el bullying no es un fenómeno reciente, sí que hemos podido ver en los últimos años la aparición de un nuevo tipo de acoso y se llama ciberbullying. Este tipo de bullying no era posible hace unos años ya que comporta el uso de las nuevas tecnologías.
El ciberbullying es considerado más peligroso que el bullying tradicional. Puede parecer sorprendente que pueda considerarse más grave un tipo de acoso que no se produce ante la víctima, pero debemos tener en cuenta la gran importancia que tienen las redes sociales, no solo para la comunicación y diversión para las nuevas generaciones, sino también para la imagen personal que se proyecta en la red. Esta imagen on-line puede ser tan o más importante que la imagen que se proyecta ante amigos, familiares y conocidos en un entorno físico.
Por otro lado, el uso de las nuevas tecnologías tiene una serie de características propias que empeoran la situación del acoso:
- El anonimato que permite Internet, que conjuntamente con la falsa creencia de impunidad en las redes sociales, puede hacer pensar a los menores que no se producirán consecuencias o que sus actos tienen menos importancia ya que no se realizan cara a cara.
- El fácil acceso a estos entornos y el potencial de difusión (redes sociales, chats, blogs, etc.) suma la posibilidad de que se añadan otras personas al acoso que pueden conocer o no al menor o incluso ser adultos.
- Ese anonimato puede impedir a la víctima saber quién o quiénes son los agresores.
- Aumenta la desinhibición de los agresores, haciendo que puedan llevar a cabo conductas que no realizarían en una situación cara a cara y además que se añadan al acoso otros menores que no se atreverían a enfrentarse a la víctima si este se produjera en una situación habitual.
- Este acoso no se encuentra limitado por un espacio físico (por ejemplo la escuela) por lo que es continuo y dificulta a la víctima conseguir encuentrar un lugar seguro para protegerse.
- Hay una mayor probabilidad de que el acoso sea observado por un mayor número de personas y un número indefinido de veces, lo que aumenta la victimización.
El ciberbullying, al igual que el tradicional, podemos observar la agresión directa y la indirecta:
- Directa: Cuando el agresor o agresores envían a través de las herramientas tecnológicas mensajes directos a otro/a menor (mensajes desagradables o amenazantes al móvil, en los chats, emails, etc.)
- Indirecta o por delegación: Implica la utilización de otras personas para asediar a la víctima. Estos pueden ser cómplices no deliberados que participan en el acoso, pero no saben que están ayudando a un ciberacosador. El agresor/es pueden hacerse pasar por la víctima en un chat o aplicación de tal forma que terceras personas (usuarios y administradores) lo ataquen y lo expulsen de esta red. También pueden piratear o robar la contraseña de su correo y enviar e-mails desagradables a sus contactos en su nombre, y a partir de aquí las víctimas pueden perder amistades y/o tener problemas con otros.
Se puede decir que es una evolución o adaptación del bullying a la tecnología actual. Esta realidad hace parecer que las nuevas tecnologías no ayudan y solo empeoran la situación, pero no podemos culpar Internet de lo que ocurre en estas situaciones, sino al uso que se hace de esta herramienta, por lo que nuestra responsabilidad es educar en un uso adecuado y responsable.
Para ello, exponemos algunas pautas educativas de cara al uso de Internet y de las tecnologías. Estas pautas son recomendables exponérselas a los jóvenes e intentar hacérselas comprender, ya que las imposiciones no tienen un buen resultado y tampoco ayudan a que las adquieran como propias:
- Consensuar con los hijos reglas claras sobre el uso del móvil, el ordenador y las consolas con el objetivo de hacerles conscientes de la necesidad de un uso racional. Para ello, es recomendable aplicarlo a nosotros mismos para dar ejemplo.
- Para poder hacer un mejor control de los horarios y del uso, es recomendable que el ordenador y otros medios tecnológicos no se encuentren dentro de la habitación del menor, es mejor tenerlos en un lugar común.
- Hacer uso de filtros parentales y opciones de seguridad para bloquear contenidos y posibles virus.
- Intentar conocer cuáles son las inquietudes de los hijos, ya sean juegos, webs o aplicaciones, con el objetivo de evitar contenidos que puedan ser dañinos o perjudiciales y también para poder compartir con ellos impresiones y opiniones sobre dichos contenidos y poder dotarles de capacidad crítica.
- Proponerles que realicen actividades alternativas, como hacer deportes, la lectura, ir al cine, acudir alguna asociación u organización juvenil, etc. Para que no centralicen tanto su ocio y relaciones sociales a los medios tecnológicos.
- Conocer y revisar con ellos los contactos que tienen en las aplicaciones o redes en las que puedan estar.
- Inculcarles el mantener unas pautas de seguridad: no compartir contraseñas, no responder o abrir mensajes de desconocidos y no compartir información personal (fotos, vídeos, dirección, etc.)
¿Y si ya le están ciberacosando?
- Se recomienda que no conteste correos o mensajes de los agresores pero si guardarlos como prueba de la existencia del acoso.
- Bloquear al agresor o agresores de todas sus redes sociales, móvil y correo electrónico.
- En el caso de que sean alumnos de la misma escuela hay que informar al centro y en casos de acoso no puntuales también se debe denunciar a la policía.
A continuación indicamos herramientas de interés ante dichas situaciones:
Teléfono del acoso escolar del Ministerio de Educación: 900 018 018 El teléfono está disponible todos los días del año las 24h y es atendido por psicólogos, trabajadores sociales, sociólogos y juristas.
Alertcops: app del Ministerio del Interior en el que desde un dispositivo móvil “smartphone”, el ciudadano pueda enviar una alerta directamente a los cuerpos policiales, hay un botón específico para el acoso escolar.
En Cataluña se encuentra la Unitat de detecció i prevenció del maltractament infantil (UDEPMI) que tiene un teléfono gratuito de atención: Infància Respon 116 111
Para poder conocer mejor como hacer un uso seguro de las nuevas tecnologías, recomendamos el acceso a la web de Pantallas amigas, la cual tiene información sobre el ciberbullying y otros peligros en las redes. Hay breves vídeos explicativos que pueden ayudar a los padres a entender mejor que es lo que puede pasar y que sirven también como herramienta de enseñanza para los más jóvenes. Enlace: http://www.pantallasamigas.net/
Marta Gómez, Psicóloga General Sanitaria